Editorial Agosto 2023
Julio nos abre las puertas ante la sociedad con un sin numero de titulares que definitivamente abre el debate en una escena un poco mas amplia. Como lo saben hacer los titulares, entregados estableciendo opinión publica, las instituciones se ponen de manifiesto como dueñas de la forma como tratar los temas en la sociedad.
Iniciando el mes de agosto, nos encontramos con un escenario interesante si queremos revisar los titulares que se han dado por el mes de julio en el marco del tema ovni. Los medios masivos se hicieron eco. La audiencia pública expone una , con actores representantes de instituciones, resolviendo la pregunta de algunos investigadores o interesados en el tema, con una pobreza específica si es que realmente queremos conversar seriamente del tema ovni. Para quienes venimos leyendo el tema desde hace mas de cuatro décadas.
El escenario en nuestro cotidiano en realidad no ha cambiado sustancialmente, aun cuando por supuesto seguimos el sendero como seres humanos cumpliendo nuestro destino.
Ante estas historietas presentadas por las instituciones, que claramente, quienes son los responsableshacen parte de las esferas mas altas de cada una de ellas, someten a la opinión publica, cualquier tópico. Anulando la posibilidad de abrir la escena en todo su contenido.
En nuestra sala continuamente, quienes nos visitan, expresan el asombro del como tratamos el tema. Nos
exponemos unicamente con los datos que han sido el resultado de investigaciones, recolección de datos y documentos, exposiciones en el marco de nuestros Congresos CIO. Hablar del como se trata el tema ovni en el marco institucional es claro que está sujeto a los órdenes geopolíticos, lejos de nuestros verdaderas responsabilidades que tenemos como seres humanos.
No se puede aceptar que unicamente porque El Congreso de los Estados Unidos, el Pentágono o algunos testigos del orden gubernamental sea suficiente para aceptar la realidad extraterrestre. Mas cuando la exponen en un dibujo alejado de la realidad a la cual debemos mirar. Atender el tema simplemente como una parte de nuestra historia es no ir al centro de la cuestión. Nuestra historia la hemos escrito en el accionar propio de la enajenación a nuestra propia identidad como seres humanos. Lo dicen textos de diferentes autores que en diferentes disciplinas se exponen ante el misterio como un tema a revisar. En estas dos ultimas centurias los ejes del poder se comprometieron establecer un nuevo lenguaje, apartándonos de lo que debemos saber. También hemos de asumir nuestro compromiso al respecto. Aceptar lo que nos dicen como que es así, cuando tenemos todos las herramientas, a las cuales podemos recurrir para educarnos de otra manera.
La desidia del individuo en este tiempo responde al estado de confort. Por lo pronto seguimos renovandonos en la información, mientras el día a día alcanza titulares como noticias del día, temas tratados en décadas anteriores.
